Acabo de interrumpir mi propia
escritura al enterarme de que hoy mismo el Premio de Narrativa José María
Arguedas 2003 y Premio Nacional de Literatura 2014 dejó este mundo habiendo
hecho un gran aporte no sólo a las letras y la televisión sino además, el
teatro, el cine e incluso la enseñanza, pues también fue académico en la
Universidad de Chile, su alma mater.
Llamarle simplemente escritor,
aunque este oficio sea en sí mismo honorable, resulta a lo menos limitante. Fue
también Caballero de la Orden de las Artes y Letras (Francia), Comendador de
las Artes y las Letras (Italia) y miembro en la Orden Marko Marulic (Croacia)
sólo por dar algún ejemplo.
Su obra es multidisciplinaria,
comprendiendo géneros como el cuento (El entusiasmo, Desnudo en el
tejado de una casa en Barcelona o Tiro libre), la novela (Soñé
que la nieve ardía, Un padre de película o Los días del arco iris
sólo por dar algunos ejemplos) e incluso la literatura infantil (La
composición y El portero de la cordillera).
Ser escritor nunca ha sido fácil,
incluso hoy existiendo tanta tecnología para respaldar y simplificar el
trabajo. Sin embargo, antes era una vocación a la cual realmente uno debía
dedicar mucho más esfuerzo. Además, la gente es mala para leer, existiendo
pocos espacios de difusión literaria como en su momento lo han sido El show
de los libros, La belleza de pensar, Una belleza nueva u Ojo
con el libro. Por ello, para un autor es difícil saber si realmente dejará
un legado significativo; en este sentido, Skármeta pudo irse estando seguro de
la huella que imprimiría no sólo por sus letras o laureada carrera sino además,
el mensaje y a fin de cuentas, es lo que todos buscamos.
2 comentarios:
También me enteré por la mañana de esta triste noticia. Además de ser un gran aporte a la cultura, Skarmeta era un viejito adorable, uno lo veía y quedaba prendada de su presencia.No me perdía El Show de los Libros
Lamentable. Lo vi muchas veces en n programa que tenía en TV. Cariñitos 🥰
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