Me da mucha rabia la inconsecuencia o discordancia entre declaración y acción. Si dices que alguien no te gusta porque su proceder te da mala espina, deberías distanciarte de esa persona en lugar de buscarla y darle alas.
Anoche me pidieron un consejo, porque ese amigo - en adelante Sr. P- quería saber si le convenía salir con alguien que aparentemente lo está engatusando. Como a veces uno aconseja en vano porque hacen caso omiso de las palabras y teniendo en cuenta que le están embolando la perdiz, le advertí que sólo daría mi opinión si la consideraba.
Según me iba contando, le dije también que debería ser más selectivo con sus amistades, para no salir lastimado o acabar arrepentido de involucrarse después, porque se nota cuando te llenan de elogios para hacerte caer. Al respecto, el código moral masónico reza "No adules a tu hermano, porque es una traición; si tu hermano te adula, teme que te corrompa".
Bien me dijo el Sr. L hace poco: "..., la gracia no es importarle a mucha gente, la gracia es importarle a pocos pero buenos".
Sin embargo, hoy en el muro de Facebook, Sr. P tiene publicado un comentario del tipo en cuestión y me pregunto: ¿Seré tonto por aconsejar cuando en realidad, cada uno es libre para hacer lo que quiere?
¿Qué pasa cuando no quieres que se rumoree sobre ti, pero das pie para ello? ¿Tienes derecho a pedir "No me cuelguen novios que no existen"? Hazte fama y échate a la cama, dicen las viejas sabias. Está claro que nadie puede meterse en vida ajena y uno debe creer parcialmente cuando un amigo pide consejo, pues el afligido en realidad sabe cómo proceder, pero busca a alguien que le dé ánimos, como si tuviera un diablillo y un ángel en cada hombro.
Lo bueno de dar consejos cuando te los piden, aunque luego no hagan ni puto caso, es que no podrán decir "Nadie me advirtió". Al final, sólo vale hacer lo que uno quiere, como dice la Rede Wicca: "Haz lo que quieras, mientras a nadie dañes". Desgraciadamente muchos ignoran la última y más importante parte.
De todas formas, no es que esté celoso ni nada parecido, porque las amistades están claras y ya enraizadas. Sólo digo que respeto la actitud, aunque no la comparto. Y aunque a veces es bueno dar consejos siendo escuchado, el amigo está presente siempre, sin recriminar con un "¡Te lo dije!".
2 comentarios:
sin duda la adulación es un peligro, un arma de doble filo, cuando alguien viene con lisonjas probablemente quiera o desee algo de nosotros.
lo de cargar novios que no existen, tengo mi teoria, en el mundo gay muchas veces por el mero hecho de hacer daño inventan relaciones o intentan meterse entre ellas, no entiendo porque la gente con pareja se vuelven mas atractiva a otra gente. es una idea que me ronda en la cabeza no se si se atiene a la verdad pero suele pasar.
muy buen escrito y una seleccion de frases y sentencias encomiable.
un saludo
Que sabio soy ;)
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