«Quien no conoce Estambul, no conoce el amor».

Yahya Kemal Beyatlı.

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Carlos Flores Arias – Yahya.

Escritor chileno.

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martes, 31 de julio de 2007

El nuevo padre de la parroquia

El nuevo padre de la parroquia estaba tan nervioso en su primer sermón, que casi no consiguió hablar.
Antes de su segundo sermón, el domingo siguiente, preguntó al Arzobispo cómo podría relajarse. Éste le sugirió: “La próxima vez, coloque unas gotitas de vodka en el agua y va a ver que, después de algunos tragos, estará más relajado.
Al domingo siguiente el padre aplicó la sugerencia y, en efecto, se sintió tan bien que podría haber hablado hasta en medio de una tempestad, completamente relajado.
Luego del sermón, regresó a la sacristía y encontró una nota del Arzobispo que decía lo siguiente:
Apreciado Padre:
La próxima vez, coloque unas gotas de vodka en el agua, no unas gotas de agua en el vodka. Además, le anexo algunas observaciones, para que no se repita lo que vi en el sermón de hoy.
· No hay necesidad de poner limón en el borde del cáliz.
· Aquella caseta al lado del altar es el confesionario, no el baño.
· Evite apoyarse en la imagen de la Virgen y mucho menos abrazarla y besarla.
· Existen 10 mandamientos, no 12.
· Los apóstoles eran 12 y no 7. Ninguno era enanito.
· No nos referimos a nuestro señor Jesucristo y sus apóstoles como “J. C. & Cía”.
· David derrotó a Goliat con una honda (china) y una piedra. Nunca se lo pegó.
· No nos referimos a Judas como “el hijo de puta ese”.
· No debe tratar al Papa por “El Padrino”.
· Bin Ladem no tuvo nada que ver con la muerte de Jesús.
· El agua bendita es para bendecir y no para refrescarse la nuca.
· Nunca rece la misa sentado en la escalera del altar y mucho menos con el pie apoyado sobre la Biblia.
· Las hostias son para distribuirlas en el pueblo. No deben ser usadas como aperitivo para acompañar el vino.
· Los pecadores se van al infierno y no “a la conch’e su madre”.
· La iniciativa de llamar al público para bailar fue buena, pero hacer el trencito por toda la iglesia, ¡NO!
IMPORTANTE: Aquel sentado en el rincón del altar, al cual Ud. Se refirió como “maricón” y “travesti con faldita”… ¡Era yo!
Espero que esas fallas sean corregidas para el próximo domingo.
Atentamente,
El Arzobispo.

lunes, 30 de julio de 2007

"Harry Potter y la Orden del Fénix"

Ya tenía el libro, pero nunca lo he leído completamente, pues debe ser un poco más breve que la Biblia. En cuanto a la película, puedo decirles que realmente merece la pena… Tiene acción, suspenso e incluso romance con el primer beso del protagonista, que dicho sea de paso, me decepciona, pues no es con quien esperaba.
Por lo demás, es una historia que seduce al espectador sin necesidad de que éste sea un fanático, como es mi caso, ni recurriendo a escenas subidas de tono como desnudos, el arma cinematográfica favorita.
Es bastante más sombría que las anteriores películas, lo cual desde luego contribuye al aspecto tenebroso de la narración. Aunque hay escenas diurnas, sólo se sabe en los exteriores, pues la mayoría de las locaciones son interiores de castillos, sótanos o bosques tenebrosos donde habitan aquellas míticas criaturas a las cuales alude J. K. Rowling para dar vida consistente a esta Gran Bretaña mágica y paralela.
Si bien el enemigo mayor de “Harry” sigue siendo este maligno hechicero innombrable, lo interesante es que el héroe debe enfrentar a otros opositores no malvados pero sí fanáticos y además, las contradicciones existenciales propias de un adolescente, que se corporizan en espectros o criaturas infrahumanas para hacer universal la constante confusión juvenil y que de este modo, sea comprendida por el público infantil.
Lo mejor de todo es que hay varias revelaciones importantes, como que el padre de “Harry” fue un fanfarrón en su época estudiantil, que el guardabosques tiene un medio hermano gigante y que al final de la historia el protagonista y el antagonista tienen un enfrentamiento final al cual sólo uno sobrevive.
Es necesario permanecer lo más concentrado posible para no perder detalle, pero se entretendrán bastante, sin importar su edad.

domingo, 29 de julio de 2007

"Los Simpsons, la película"

Hoy vi la tan publicitada película de "Los Simpsons", pero francamente no me pareció la gran cosa que todos pintan, como un acontecimiento que los admiradores de la serie debimos esperar durante años.
La verdad es que resulta como un capìtulo alargado de la serie y si bien hay partes chistosas, la trama es casi igual que en cualquier episodio donde "Homero" inicia una crisis nuclear en la planta.
Sinceramente, la serie ha perdido un poco de gracia desde hace algún tiempo. Ya es algo predecible y cansa que "Homero" viva cagándola o que "Marge" sea tan tontamente devota.
Para innovar un poco, "Bart" sale desnudo y tiene una crisis de identidad, que lo hace casi pedir la adopción de "Flanders"... Ello me recordó un capítulo en el cual la custodia de los niños "Simpsons" es otorgada temporalmente a los vecinos.
Además, "Lisa" defiende sus altos ideales y tal vez una de las cosas más interesantes sea que durante los créditos, la bebé dice su primera palabra. Si se la compran pirateada, posiblemente no verán esto; aunque por otro lado, todo hace ver que en su adultez será muy violenta o experta en armas y defensa personal.
En resumen, no hay casi nada que no se haya visto antes en la serie. Buena para reirse un rato, pero no es comparable a los episodios clásicos.
Igual hay personajes que no aparecen y no es para que sea considerada casi la octava maravilla del mundo.
En mi opinión, los realizadores no debieron esperar entre dieciocho y veinte años para una película, sino hacerla cuando la serie todavía te sacaba la risa a carcajadas. Nada que dure tanto tiempo con los mismos recursos temáticos será siempre bueno.
El otro error es que viendo todos los adelantos que se han transmitido mediáticamente, casi ves la película entera, porque muestran las escenas más interesantes y ya no hay quien ignore que "Homero" es responsable de una catástrofe que después debe solucionar.
Todos los críticos y comentaristas han contado casi la película completa para decir de qué se trata, basados en los adelantos, así que no soy el primero y seguramente tampoco el último.
Quienes aún no la hayan visto, no pretendan mucho, porque se decepcionarán. Mejor esperen a que salga en DVD o cómprenla pirateada si son muy fanáticos y véanla tranquilos en su casa... Ahórrense la plata de la entrada al cine y la movilización para llegar, especialmente quienes usen el Transantiago.

viernes, 27 de julio de 2007

Mochilas en desuso

Éstas son las mochilas de las cuales quiero deshacerme, porque ya no las ocupo. Hay mochilas, bolsos y hasta bananos, todos usados pero en muy buen estado, porque los usé poco.
Con ellas se irá gran parte de mi colección y sólo me quedaré con otras cinco que no aparecen en la foto.
Necesito desocupar espacio en mi armario, porque hace poco Kriko se metió ahí y casi se pierde entre tantas mochilas. Hay Saxoline, Head, NKSport, Fenomenal y otras sin marca visible.

Casi muerto

Ayer tanto al desayuno como al almuerzo sufrí dos hipoglucemias severas que me tuvieron inconsciente y hoy, también a la hora del almuerzo, tuve otro episodio, aunque no grave.
Sin embargo, llamé a Megasalud para solicitar una hora de atención médica con mi doctora, Iva Camacho. Necesito tener ese control para ver si las dosis de insulina ultrarrápida que estoy inyectándome son las adecuadas.
Tener hipoglucemias no es ningún chiste, pues se corre el riesgo de morir si durante el desmayo no se me administra suero glucosado. Por ello, cuando tengo un bajón con el cual no pierdo el conocimiento, debo ingerir algo dulce… De ahí que en mi mochila siempre lleve un frasco con azúcar.
Por poco, el mundo no se quedó sin este gran escritor.

martes, 24 de julio de 2007

El mito de la raza andrógena

En el principio, los dioses crearon distintas razas para legarles la Tierra y todo cuanto existe sobre ella. Para darles forma usaron oro, plata, cobre y bronce en cuatro intentos que fracasaron, hasta que Zeus encomendó la forja de una quinta raza a partir del lodo.
Los dioses entonces, crearon seres con forma humana, pero de naturaleza dual; su costado derecho era masculino, mientras el izquierdo lo era femenino.
Con el tiempo, esta raza se hizo orgullosa, jactándose frecuentemente de no necesitar a los dioses porque ya eran felices al complementarse perfectamente. Desde el Olimpo, sus creadores que siempre los observaban, acudieron a Zeus solicitando una asamblea.
El padre de los olímpicos escuchó atentamente los alegatos de cada dios y diosa, quienes celosos argumentaban para gestionar la destrucción de esta raza, que como las anteriores, había renegado de ellos.
_Destrúyelos, amado esposo. Nadie está sobre ti ni debe renunciarte_dijo Hera, diosa del matrimonio.
_Se jactan de no necesitarme, pues tienen un amor perfecto_alegó Afrodita, patrona del amor sexual.
_Creerán ser tan poderosos, que pronto querrán subir al Olimpo para tomar nuestro lugar_argumentó Ares, señor de la guerra.
Al oír esto, Zeus, quien ya había luchado contra los titanes por la supremacía, habló lo siguiente:
_Atenea, hija mía, tú que eres la diosa de la sabiduría…, ¿crees que la soberbia de los andrógenos pueda alcanzar semejantes proporciones?
_Definitivamente_contestó ella_. Sin embargo, hemos intentado crear vida con noble material y degradándolo, hicimos vivir al lodo; no podemos seguir destruyendo nuestras creaciones, pues entonces no dispondremos de materia menos valiosa que el lodo para un nuevo intento.
_¿Qué sugieres entonces?_preguntó nuevamente Zeus.
_Te aconsejo pues, castigarlos según sea tu deseo, pero enseñarles con ello que su orgullo es inconducente, pues se deben a nosotros.
_Puesto que presumen de complementarse perfectamente, decreto que estos seres sean separados en dos mitades; cada una debe ser enviada a polos opuestos_dijo Zeus.
Los dioses al oír esto, siguieron a su rey padre hasta el extremo donde el Olimpo y la Tierra se separan. Una vez allí, desataron terribles tormentas con bolas de fuego y relámpagos, separando a los andrógenos en sus dos mitades.
Mientras Mnemosin, la diosa de la memoria borraba sus recuerdos, el dios mensajero Hermes los transportaba velozmente de un lado a otro.
Desde entonces y hasta ahora, los seres humanos hemos vagado por toda la Tierra, dispuestos a superar cada prueba por difícil que sea, para hallar nuestra otra mitad…, el alma gemela que nos regrese aquella felicidad perfecta de la cual nuestros antepasados fueron despojados.

jueves, 19 de julio de 2007

Mi 26º cumpleaños

Cuando llega este día y aunque no pueda creerse, muy pocas veces recuerdo cómo ha sido el año anterior. Tengo imágenes de cumpleaños que me han marcado por un suceso u obsequio específico, de los cuales sólo algunos conservo.
Colgada en la pared de mi habitación por ejemplo, se encuentra la ballesta que papá me regaló al cumplir los dieciocho, graduándome de Cuarto Medio. Sin embargo, algo aun más permanente es el recuerdo de mi primer diario, que me diera mi querida abuelita materna ya fallecida, cuando apenas tuve edad para tomar bien un lápiz, a los cinco años… Aunque ya se haya perdido con el paso del tiempo y la mayoría de sus páginas tuvieran dibujos en lugar de anotaciones, fue entonces cuando descubrí que escribir sería mi desahogo, pasión y vocación en la vida.
No puede haber obsequio material más valioso que aquél con el cual descubres tu propósito en este mundo, el regalo personal que Dios ha preparado para ti. Aunque mi primer diario se perdiera, el recuerdo de mi abuelita Ester dándomelo, es algo que tendré hasta perder la memoria o la vida.
Todo en este mundo pasa, pues hasta las pirámides egipcias se han corroído con los milenios. Sin embargo, del mismo modo en que sabemos quienes las construyeron, aunque no estuviésemos presentes, recordamos los grandes y definitorios momentos en nuestras vidas, aun cuando por diversas razones los seres queridos que nos acompañaron, ya no estén físicamente con nosotros.
Son éstos los mejores obsequios que puedo conservar, en lugar de aquellos cumpleaños con algún negativo recuerdo de adolescencia. Son los amigos, los seres queridos y los cariños verdaderos realmente la medida para saber si hemos sido importantes.
Una lágrima que escapó de mi ojo, conmemora a los que ya no están físicamente conmigo y al mismo tiempo, agradece a Dios por quienes sí.

miércoles, 18 de julio de 2007

Nikos Tsaikos

Hoy recibí una tarjeta electrónica felicitándome por mi cumpleaños. En esta época de grandes avances tecnológicos que nos permite pasar por alto las distancias e incluso los idiomas, hacerle llegar tu cariño a alguien importante que no ves frecuentemente, es lo más fácil del mundo.
Lo importante es que dicha tarjeta fue enviada por Nikos, mi amigo griego de My Space con quien mantengo correspondencia electrónica desde hace tiempo. Partimos hablando sobre nuestros gustos en música, cine y televisión, pero ahora sé que tiene una hermana dos años mayor, cuenta con veintiocho primaveras a su haber, es periodista y le gustaría conocer mi país tanto como a mí el suyo.
Definitivamente internet abre un sinfín de posibilidades… Si hace un año alguien me hubiese dicho que tendría un amigo griego, con lo que me agrada aquella cultura, no lo habría creído. Es sorprendente que luego de buscar amistades e incluso trabajo en mi propio país, no encontrara nada aún, sino sólo decepciones, mientras que al otro lado del mundo un hombre griego buscó mi amistad después de leer en mi página que me agrada el pop griego, turco y árabe.
Nikos me parece una joya, la aguja en el pajar, pues siendo tan difícil hacer amistad con alguien que podría vivir en mi ciudad o incluso al otro lado de mi calle, cuando lo intento sólo encuentro a gente farsante el 90% de las ocasiones. No niego que el otro 10% corresponde a gente sincera, afable y honesta cuyos valores morales te permiten estar seguro de no ser burlado.
Sin embargo, cuando te aventuras a hacer amistades por un medio de comunicación que bajo cualquier instancia puede ser frío, no debes olvidar que si bien recibes mensajes de una persona, no estás frente a ella y de ser así, podrías encontrarte con alguien completamente opuesto a tus expectativas; el clásico ejemplo se da con las falsas descripciones físicas, que no son tan riesgosas como un rostro bonito cuya alma es negra.
Por otro lado, buscar amistades no es tan arriesgado como buscar pareja. Usualmente se comete el error de pretender a alguien con maravilloso aspecto físico, grandes potenciales de éxito profesional y cualidades emocionales prodigiosas… Somos poco realistas e irracionales al esperar que internet sea nuestra hada madrina, pues por lo general y con escasas excepciones, quien llena los requisitos emocionales al ser sincero, afable, honesto, fiel, divertido, culto, inteligente, sensible, comprometido, apasionado o algo más, es el menos pensado. Al contrario, quien posee gran belleza física o éxito no necesita meterse a buscar pareja en internet.
Si constantemente pensamos que podríamos encontrarnos con un malvado y siniestro personaje, aunque tengamos intención y razón de ser precavidos, también somos paranoicos. Como bien dicen los ancianos, quien no arriesga no gana y por mi parte, agradezco al Cielo haber admitido a Nikos entre mis amistades porque hasta el momento, me ha dado bastantes alegrías, sin olvidar su calidad como ser humano. Al fin y al cabo, es lo que importa al establecer relaciones afectivas y no la belleza física, éxito profesional, poder económico, ideología política o religiosa, país de origen u orientación sexual.
Es irónico que teniendo tantos medios de interacción humana, seamos tan fríos y regularmente no sintamos remordimiento cuando lastimamos los sentimientos de alguien, porque nos concentramos en nuestras vidas y la concreción de metas que siendo válidas, nos hace ser egoístas. Por ello es tan agradable hallar a una persona a quien le agradas desinteresadamente y no es prejuicioso, pues le interesas humanamente.

martes, 17 de julio de 2007

Mensaje a Villouta

Villouta:
Lo pensé mucho antes de enviarte el presente correo, pues con él tal vez esté renunciando al último vestigio de dignidad que gozaba contigo, pero valdrá la pena si con ello, logro que nadie más participe en tus concursos.
Como recordarás, soy el desafortunado ganador del concurso que instauraste en marzo pasado, cuyo premio era una cita de carrete contigo para quien escribiera el mejor ensayo defendiendo tu postura de ser extremadamente gay.
Pues bien, luego de cuatro meses, al fin hace tres semanas y después de mucho postergarlo por diversas razones que detallaré a continuación, me escribiste proponiéndome asistir a la tocata de Circus Rock, donde harías tu rutina de Stand-Up Comedy el viernes 13 de julio y hasta me diste tu número telefónico. Sin embargo, cada vez que te llamaba estabas saliendo de la tina, me llamarías dentro de diez minutos, trabajabas, habías olvidado telefonearme, no contestabas o estabas durmiendo y ante esto, debo agradecer a Dios el no ser tan inoportuno como para llamarte cuando estuvieras teniendo relaciones sexuales, pues entonces sí me habrías cortado. Cabe mencionar que si te resulta tan difícil e incómodo atender un llamado mío, no debiste darme tu número, a menos que tu intención fuera ver hasta dónde llegaba mi paciencia insistiéndote.
Tal vez no recuerdes que al final de nuestra última charla prometiste llamarme o escribirme un correo electrónico para confirmar la cita y darme detalles de hora, sitio, costo de entradas y demás. Hoy es el día cuando aún espero una manifestación tuya para decirme por qué me dejaste esperando. De no ser porque aquel viernes a las diez y media de la noche visité tu blog para escuchar tu discurso sobre Pamela Jiles, seguiría sin saber que el día anterior habías posteado el afiche del evento, lo cual significaba obviamente la confirmación del mismo. ¿Acaso pretendías que visitara constantemente tu blog en lugar de llamarme?
Ello sería comprensible si hubieses perdido mi número de móvil, el cual desde marzo a la fecha te di cuatro veces. Mas descarto esa posibilidad, pues además tenías mi número telefónico particular, dirección de correo electrónico y blog, el cual dudo que alguna vez leyeras pese a que mi ensayo te pareció sorprendente.
Al margen, no puedo dejar de mencionarte que no debes llamar “narcisa” a Jiles sin importar si estás o no en lo correcto. Después de todo, nada es más narcisista que hacer un concurso cuyo premio es una cita contigo y encima de todo, incumplirla.
Comprenderás que aquel día descartara toda probabilidad de seguir alargando el cuento. Sólo para refrescar la memoria y consciente de que en tu blog hay pruebas de mis afirmaciones, me permito recordarte que en principio el resultado del concurso sería entregado el 6 de abril, cuestión que se postergó hasta la última semana de mayo por tu retrazo al leer los ensayos.
Como si eso no fuese suficiente, junio fue un mes muerto porque anulaste la alternativa de sauna en el hotel Sheraton argumentando ya no ser socio de su gimnasio. Esto tuvo como consecuencia que intentaras planear una cita de último momento… Me propusiste ir al Stand-Up sin tener fecha y luego, me preguntaste si sabía inglés para entenderlo; ante mi negativa, diste la alternativa de una tarde sabatina en el cine, que rechacé por la incomodidad de estar en un pasillo usando silla de ruedas y a oscuras en caso de un incendio o simple temblor, pues todo el mundo habría pasado por encima mío para salvarse, sin tomar en cuenta cuán despreocupada es la gente al tener un minusválido en su camino, existiendo o no emergencia.
Además, pensándolo mejor, una cita en el cine es algo que propones a una persona cuando no te interesa saber nada de ella ni mirarla a la cara, pues ves la película o bien, a alguien que ya conoces bastante. En ambos casos, te recuerdo que el objetivo final del dichoso concurso era conocer, hablar y hacerte amigo del ensayista a quien definiste como “cabeza pensante, capaz de escribir un ensayo” cuando me anunciaste.
Hasta debí darte cuatro alternativas de cita y ocuparme personalmente de ayudarte en ese aspecto, ante tu demora y notorio desinterés. Considera que tanto la revista TV Grama como TV y Novelas y Miss 17 hacen concursos similares, donde el premio es una once con tu artista favorito, pero en este caso, el ganador asiste sin preocuparse de nada, pues es el equipo de la publicación quien se encarga de organizarlo todo y dentro de un plazo razonable. Con esto me refiero a que no debiste iniciar dicha empresa si eres incapaz de producir algo tan sencillo, adquiriendo un compromiso y acabas queriéndome llevar a cualquier parte, como un salvavidas para desembarazarte.
No debo descartar que parte de los aplazamientos se debiera también, a que ambos estuvimos enfermos o muy ocupados en algunas ocasiones. Ello ciertamente no justifica tu demora, ni mi indignación hasta claudicar como lo estoy haciendo.
Me resulta inevitable preguntarme cuánta gente participó. Según lo veo ahora con mayor frialdad y algo molesto, quizá tu propósito original de hacer amistad con el ganador era cierto, sólo si resultaba ser un doctor judío, soltero y gay como proclamas en el blog… Caso contrario, tal vez tu objetivo se pervirtió de marzo a mayo y sólo quisiste comprobar cuántos de tus seguidores estaban tan desesperadamente ansiosos por salir contigo, como para participar en un concurso cuyo premio definitivamente ya no entregaste. Sin duda esto te serviría para ensalsar tu ego.
Digo esto porque cuando finalmente me anunciaste como ganador, te comprometiste a transcribir mi ensayo en tu blog para la lectura de todos los concursantes. Otra promesa rota, pues aún no hay ni una sola palabra de dicho trabajo en la página. Ello me hace pensar que lo perdiste irremediablemente y peor aún, que te importa tan poco como cumplir la cita de carrete.
Creo innecesario decirte cuán decepcionado estoy y en esto, debes concordar. Mientras ignorabas que soy minusválido, te resultó interesante salir conmigo; empero, cuando te percataste de lo difícil que parecía planear una cita de carrete con un discapacitado, todo se te hizo negro. Para alguien que habla tanto contra la discriminación, me parece inconsecuente y si bien puedo estar equivocado, no deja de ser reprochable que juegues con el interés y tiempo de una persona, minusválida o aparentemente sana, sólo para ver hasta cuándo te espera.
Debí haberte provocado muchos días y noches de risa pensando en lo ridículo y patético que fui al insistir y esperar tanto, pues cualquier otra persona habría reclamado en la mitad de tiempo. Demás está decirte que considero incluso humillante tener que escribirte para reclamarte tanto retrazo e incumplimiento de compromisos. Debiste ser tú quien me buscara para explicarme por qué no llamaste o al menos, saber si seguía vivo y la razón de mi ausencia el pasado viernes en el último panorama propuesto. Con esto acabaste de demostrarme que jamás te interesó realmente concretar la premiación.
No puedo dejar de mencionarte lo molesto que me resultaba el que constantemente aclararas que la cita consistía en un carrete y no en sexo, condición que daba por hecho. Nadie aclara tantas veces algo si no pretende lo contrario… Dicho de otro modo, el inocente declara serlo sólo una vez, en tanto que el culpable insiste en su inocencia hasta el hartazgo.
Jamás pretendí salir contigo para terminar en tu cama. Si mi intención no hubiese sido siempre sólo conocerte y tal vez, ser tu amigo si te agradaba, sino al contrario, acostarme contigo como parecieras haber creído por lo reiterativo de tus aclaraciones, no habría participado. Si la convocatoria incluía a participantes de todas las edades adultas y ambos sexos, tampoco debiste creer como jactancioso, que sólo participarían quienes quisieran tener contigo algo más que sólo un carrete.
Cuando se te ocurrió hacer este concurso, debiste asegurarte de poder cumplir todas las condiciones de tiempo, planeamiento y panoramas que tu mismo propusiste sin que nadie te obligara, pero cambiaste las reglas del juego cuantas veces se te antojó, jugaste con todos y perdiste credibilidad. Puedes excusarte diciendo tener mucho trabajo o problemas personales, lo cual sinceramente habría comprendido dentro del plazo que estableciste al principio, hasta el punto de querer apoyarte como amigo potencial. Pero después de todo este tiempo y tu renuencia, ello ya no te sirve como excusa… Como participante, nada me debería importar, excepto que cumplieras tu compromiso: el premio del carrete, sin esperar nada luego.
Sin embargo, a estas alturas del partido, no sólo tú has perdido todo interés en el concurso, sino también yo; todo tiene fecha de vencimiento…, mi interés y paciencia no son la excepción. No quiero parecer la novia despechada en el altar, tampoco el pobre niñito inválido mendigando tu atención. Detestaría que salieras conmigo sólo por cumplir y no quedar mal o porque te da pena fallarle a alguien como yo.
Es porque sé cuánto valor tengo como persona y amigo, que rechazo categóricamente todo panorama de carrete que apunte a sacarte la espina para quedar bien ante quienes supieron de tu desafortunado concurso y participaron en él. No pretendo sacrificar mi dignidad yendo contigo al cine, donde no me hablarías, o al Stand-Up, donde pasarías toda la noche sobre el escenario. Una cita como la que propusiste, para conocernos y hacer amistad, contempla un espacio y tiempo que ambos pudiéramos dedicarle al otro y no un encuentro en el cual me tuvieras abandonado en un rincón húmedo, oscuro y hediondo mientras haces otra cosa para luego, mentir diciendo que salí contigo y fue genial.
No te esperaré veinte años como Penélope a Ulises. El carrete ya no fue, pues estiraste tanto la fecha de concreción y cambiaste las condiciones hasta restarle total valor al hecho de “salir con José Miguel Villouta”, como si fuese un acontecimiento que cambiara mi vida por completo y la separara en antes de Villouta y después de Villouta.
Después de que no me llamaste el viernes para confirmar nuestra cita, dejándome esperar hasta Dios sabe cuándo y habiéndome desahogado, no te imagino felicitándome el próximo jueves por mi vigésimo sexto cumpleaños. Sin embargo, si mi ensayo te gustó tanto, supongo que esto te parecerá una obra magistral.
Enviado por correo electrónico a José Miguel Villouta y a la producción de “S.Q.P.” en Chilevisión anoche.
Como aclaración, sólo diré que Villouta no anunció al ganador de su concurso la última semana de mayo como creí, sino el lunes 3 de ese mes. Por lo demás, todo es cierto y el anuncio ha sido retirado del blog "Pink Tank", lo cual comprueba que nunca llegará a concretarse.

viernes, 13 de julio de 2007

Fecha de vencimiento

Hace algún tiempo recibí un correo electrónico de J. M. Villouta dándome el número de su teléfono particular y proponiéndome hoy ver a Circus Rock en vivo, evento donde él haría su rutina de Stand Up Comedy… Todo esto en el marco de su concurso “Gane una cita con José Miguel Villouta”, del cual yo fui ganador.
Para resumir un poco el cuento, participé a mediados de marzo con ánimo de que un periodista evaluara mi redacción, pues el concurso consistía en escribir un ensayo titulado “Soy extremadamente gay!”, cuyo contenido aludía a un artículo periodístico criticando la exposición de J. M. como homosexual mediático… Se suponía que los resultados serían entregados el 6 de abril, fecha que se postergó por diversas circunstancias hasta fines de mayo.
En todo ese tiempo y consciente de que Villouta podía contactarme a través del blog, correo electrónico, número de móvil y teléfono particular, no me preocupé hasta que cierto día Iván me preguntó si acaso ya había salido con él. Me aconsejó que le insistiera y por eso, le escribí.
Ciertamente nos escribimos cuatro o cinco veces para acordar la cita, hacer un panorama y cambiar la fecha por diversas circunstancias. Cuando lo llamé, estaba saliendo de la tina, escribiendo para su trabajo o haciendo alguna otra cosa. Acordamos que hablaríamos en una fecha más próxima a hoy.
Pues bien, el martes pasado y después de publicar mi último artículo, lo telefoneé para pedirle su opinión, sabiendo que mi ensayo le pareció maravilloso. Sin embargo, como los dioses me otorgaron el don de la oportunidad, lo desperté. Obviamente creyó que lo llamaba para programar nuestra cita y como era de esperarse, me despidió más rápido de lo que corre Hermes, prometiéndome llamarme o escribirme.
Esperé, esperé y esperé noticias suyas, proponiéndome no llamarlo para evitar ser inoportuno nuevamente, pero ésta es la hora en que definitivamente no me contactó.
Ya resignado, visité su videoblog para escuchar por segunda vez su discurso sobre Pamela Jiles y comparar opiniones. Sin embargo, me encontré con que ayer blogueó el afiche del evento, donde claramente se leen todos los detalles como día, hora, lugar, valor de entradas, dónde adquirirlas y el programa. Basándome en la opinión que tanto Cury como Katty despotricaron cuando el martes las telefoneé para contarles toda la historia del concurso, sin resúmenes, deduzco que Villouta esperaba mi visita a su blog y no consideró necesario llamarme o escribirme como prometió.
Perdí como en la guerra por no tener programada mi lectura de “Media Text Rehab” en el primer lugar de mi agenda. ¿Mala suerte? Definitivamente no estoy seguro… En mi caso, nadie cumple los compromisos que adquiere conmigo, ya sea llamarme, escribirme, visitarme o reunirnos.
Villouta no debió hacerme esperar una llamada o un correo electrónico, si pretendía que me enterara de los detalles del evento a través de su blog. En fin, tal vez Cury y Katty, quienes saben mucho más de citas y carretes que yo, estén en lo cierto al despotricar tanto.
Por otro lado, sabiendo que cualquiera en mi posición consideraría el seguir planeando dicho encuentro como una indignidad, sé que nada se consigue si antepones el orgullo a la consecución de un objetivo.
No seguiré buscándolo ni insistiéndole, pues si él quiere reunirse conmigo para conocernos, me contactará; si ello no ocurre, es porque no tiene caso seguir adelante.

martes, 10 de julio de 2007

Genio y figura

Esta mañana vi “S.Q.P.” y aunque no trabajo en ese programa, decidí escribir este artículo con el mismo carroñoso, cizañero y deslenguado espíritu...
Tanto intentar conseguir empleo en diversos medios de comunicación desde 2005 sin éxito y escribirle una carta a Sebastián Piñera, básicamente quejándome de las políticas empresariales discriminatorias hacia los minusválidos y el manejo comunicacional que hace el gobierno y la oposición sobre la cesantía, sin obtener respuesta ni comentarios en el blog aún, me hacen darme cuenta de varias cosas:
En primer lugar, no pretendo convertirme en el vocero de todos los sectores sociales discriminados ya sean minusválidos, gays, prostitutas (os), pueblos originarios, drogadictos, madres solteras, hijos no reconocidos, habitantes de comunas peligrosas y demás. Sin embargo, es inevitable que al menos los cesantes de este país se sientan identificados.
Quienes ya han leído este blog, saben que soy técnico en comunicación social con mención en producción de eventos y que además, escribí una novela épica aún no publicada por falta de tiempo o empeño. De todos ellos, sólo una persona me ha manifestado abiertamente su sorpresa y admiración al encontrar alguien de mi edad que se dé el trabajo de investigar durante un año todo lo necesario para escribir una historia ficticia ambientada en la Babilonia de 1795 a. de C. El joven cineasta Oscar Contreras es el único en haberme ofrecido una oportunidad laboral, que todavía no se concreta pero agradezco sinceramente.
Me da la impresión de que sólo él es capaz de reconocer el talento, pues no lo busqué, sino que llegó a mí a través de My Space. Podría considerarlo una mera casualidad, de no tener ideales místicos que me demuestran lo difícil de distinguir entre casualidad y destino.
Por otro lado, me conflictúa pensar que después de intentar sucesivamente hacer contactos para empleo, nadie sea capaz de ver mi potencial, que malo no debe ser porque ya he tenido el reconocimiento de muchos y en esto, francamente me importa un carajo ser falto de modestia, pues conozco mi capacidad y dones.
Para afirmar que soy un minusválido discriminado, necesito pruebas. No los aburriré reiterándole todo el peregrinaje que he hecho desde mi titulación, porque ya lo hice en mi carta a Piñera, pero me basta con decir lo siguiente: El pasado viernes 29 de junio, como todos ustedes saben, fui al programa “Invasión” y aproveché la oportunidad para entregarle un currículum vitae a la propia productora, quien me dijo que lamentablemente no podrían contratarme en ningún área del canal pues no requieren a alguien con mis capacidades pero sobretodo, porque las contrataciones y financiamientos son entregados a fin del año anterior; hasta ahí, todo bien. Sin embargo, al ver “S.Q.P.” me doy cuenta de que han contratado a la modelo Romina Salazar como panelista esporádica, siendo mitad de año y sabiendo que todo cuanto dice no tarda una semana en ser comprobada mentira, ignorando el hecho de que carece absolutamente de talento, tampoco tiene el hábito investigativo de una reportera porque no lo es y además, pasando por alto que gran parte de quienes se sientan junto a ella han sido alguna vez aludidos en sus intrigas o que para el público de cabeza pensante llega a ser desagradable ver a otra tonta en televisión, especialmente a la hora de almuerzo. Pregunta: ¿Con cuántos tipos debería acostarme para ser panelista sin importar mi talento, o la falta de él?
De otra forma no me explico cómo otras tantas tontas tienen cabida tan fácil en los medios, si para alguien talentoso y esforzado (yo u otra persona) es válido que las contrataciones sean en un periodo determinado. Para tener la suerte de muchas, debería cumplir tres condiciones: Ser mujer, tetona y perra, en el más amplio sentido de la palabra.
Por mujeres como éstas, se espera que una enfermera se acueste con el doctor, una abogada con el juez, una secretaria con el ejecutivo, una periodista con el editor, una actriz con el director y toda mujer profesional exitosa con el hombre inmediatamente superior a su cargo.
Peor aun es, que sean mediáticamente más valoradas las harpías busconas, bulímicas, de lengua viperina y con glándulas mamarias artificialmente desarrolladas en lugar de verdaderos artistas, librepensadores, intelectuales, profesionales académicos o sencillamente gente con valores morales auténticos que debería ganarse un trabajo por el mérito de su esfuerzo, capacidad adquirida y talento innato.
Quizá es cierto que los últimos no somos favorecidos estéticamente en muchas ocasiones, tampoco santos ni mártires porque cada quien tiene una mancha en algún lugar. Sin embargo, es por nosotros que estas figuras autoimpuestas no caen de su altar tan fácilmente como subieron. Para degradar a uno de estos “dioses mediáticos”, es necesario sorprenderlo en una conducta altamente reprochable porque se contradiga con los principios que siempre predicó, tal como lo ocurrido con Cecilia Bolocco y Luciano Marocchino.
Cuando estudiaba comunicación social, muchos profesores me plantearon la problemática del contenido mediático: ¿Es el público capaz de exigir y definir el contenido mediático o éste es impuesto por las altas esferas de poder que inevitablemente manipulan lo que vemos y escuchamos? Que conste que estudié una carrera por la cual merecería estar en un medio, frente o tras la cámara, computadora o el micrófono, a diferencia de quienes son don nadie hasta acostarse con un famoso y chuparle la fama cual vampiro succiona la sangre.
Es interesante reflexionar hasta dónde el contenido mediático es elegido por nosotros o impuesto por ramas elitistas de poder que intentan camuflar con frivolidades los reales problemas de la nación como cesantía, salud, delincuencia, pobreza y corrupción o dicho de otro modo, si somos libres o manipulables. Mi padre puede darse el lujo de decir que la programación es una mierda y usualmente, defiendo “S.Q.P.” argumentando que ante tanto lío, la población necesita contenido mediático frívolo como éste o “Mekano” en su momento, para no obsesionarse. Empero, cabe discutir hasta qué punto dichos programas son defendibles con esta razón y cuándo la futilidad sobrepasa los límites del entretenimiento para convertirse en asquerosa subestimación del medio hacia el público.
No dudo que muchos de ustedes, cabezas pensantes, encienden la radio, la televisión o la computadora o leen los diarios y se sientes tratados como estúpidos conformistas. Somos así considerados por quienes pretenden desplazar de la agenda noticiosa tantos horrores que afectan nuestra sociedad y de las cuales, tanto causa como efecto son minimizados por autoridades.
Para éstas, es preferible que el proletariado se preocupe más de los líos amorosos y/o sexuales de Pinilla que ocuparse en oponerse a la injusticia y desigualdad social, pues entonces sería inevitable su derrocamiento y el posterior descubrimiento de verdades oscuras.
Si en Estados Unidos los medios disfrazan la realidad para que el público no se entere de los reales desastres ocurridos en Medio Oriente, por ejemplo, es obvio que Chile sufre el mismo fenómeno.
La asquerosidad que producen en cierto sector del público los tongos protagonizados por nuestra farándula, son rentables para una enorme cantidad de gente, pero perjudiciales a una escala social muchísimo mayor.
Entre las que consideraba cabeza pensante y que posteriormente se dejó absorber por el medio, está indudablemente la reconocida periodista Pamela Jiles, quien ahora se hace llamar “escritora”. ¡¿Escritora?! Sin ánimo de ofender, es necesario que aclare un punto crucial: Ser periodista, no lo hace a uno escritor. Para mí, quien se llame de ese modo con derecho es aquél que escribe apasionado, entregado, involucrado más de dos páginas por capítulo.
Escritores son Anne Rice, J. K. Rowling, Helen Fielding, María Teresa Budge, Isabel Allende, Bram Stoker, Irving Stone, José Donoso, Ovidio y hasta Homero sólo por mencionar algunos. Decir que Pamela Jiles es escritora después de haber leído “Fantasías sexuales de mujeres chilenas”, me parece insultante para todos quienes se han ganado un puesto como referencia literaria. Sin duda hubo algunos que se sintieron agradados con ese libro, “Confesiones sexuales de hombres chilenos” y ahora tendrán un pan recién salido del horno, titulado “Maldita farándula” y que ella misma ha admitido escribir durante el tiempo de ser panelista en el programa.
Aquí seguramente sonaré similar a otra cabeza pensante…, José Miguel Villouta, con quien posiblemente salga este viernes, dicho sea de paso. Es increíble que luego de ser despedida de un canal de cable por expresar una opinión política absolutamente legítima y trabajar como panelista en “S.Q.P.” hasta hoy por sus contactos, habiendo sido una de las principales aludidas en muchas polémicas que culminaron con la salida de algunos miembros fundadores del equipo, tenga pluma para escribir mal sobre muchos de los rostros gracias a cuyas controversiales vidas, ha comido este último tiempo. No me malentiendan, es tan increíble, que casi llega a ser respetable por sus agallas.
Sin embargo, no pienso gastarme los ocho mil quinientos pesos que cuesta “Maldita farándula”, sólo para comprobar que no es sino la destilación del veneno propio de la autora y ajeno contra distintos personajes, como en un glosario de términos donde menciona el nombre de alguien y lo define en rudas e irónicas palabras que, según dijo el viernes pasado, le traerán muchos problemas.
No deja de ser interesante, pero tampoco necesito leer “Maldita farándula” para saber que posiblemente y al menos en ese aspecto, Jiles y yo tengamos la misma opinión sobre algunos mencionados y por otro lado, que de ningún modo podrá ser considerado un trabajo literario clásico. Sería como invitar a Krishna Navas de Caso al programa “Una belleza nueva”, antiguamente “La belleza de pensar”, para ser entrevistada sobre su primer y único libro titulado “Papeles de amor” por el admirable conductor y escritor Cristián Warken.
Quien haya leído, o mejor dicho hojeado “Papeles de amor”, sabe dos cosas: La primera, que gastó muy mal su dinero y la segunda, que el contenido de cada página es tan pobre como para caber en una servilleta de McDonald’s. Al menos, Jiles se salva por redactar sus ideas de modo que parece una verdadera teoría sociológica, aunque sea el más burdo de los temas como en este caso.
Por otro lado, redactar de manera que pueda esconder sus insultos a ojos de un tonto o disfrazarlos con excesiva verborrea, puede jugarle en contra porque si el público se conformó con ver “S.Q.P.”, no estará interesado en comprar un libro cuyo vocabulario rico por excelencia, deberá descifrar para saber que son los mismos contenidos del programa dirigidos a gente que estudió periodismo u otra carrera relacionada con el lenguaje y no se comunica con un léxico florido… Nótese que escribo a la altura. Como bien dicen en el canal Infinito, la señal más clara de una mente elevada, es expresar las ideas más complejas en palabras simples.
En fin… Ya sea por medio de televisión, radio, internet, diarios, revistas y ahora libros, la farándula definitivamente es una de las tantas máscaras utilizadas para enceguecer a la gente común con respecto a la realidad.
Desgraciadamente, Chile es un país tercermundista hasta en eso, pues la gente es conformista y poco crítica de su entorno; se conforma con lo que los poderosos le dan y no es capaz de cambiar su realidad de forma categórica. El cesante se queda en casa quejándose por no tener trabajo, el gay se agrupa con los suyos y anticipa la supremacía del heterosexual, cualquier persona de este país en desventaja por cualquier situación, lo es porque inicia su camino considerándose paria, mucho antes de que otros vengan y se lo confirmen.
El desventajado muchas veces lo es por esconderse tras su problema, pretender que éste tenga algún propósito o simplemente, esperar que otro luche sus batallas y más aún, que la oportunidad venga sola a tocar su puerta. El chileno común vive quejándose del trabajo, la cesantía, el gobierno y la mierda en los medios, pero es tan mediocre que si le dan a escoger entre eso y algo desconocido pero aparentemente mejor, por temor se queda con lo primero, porque es un cobarde que no se arriesga y piensa “Es más fácil quedarme como estoy y no perder lo poco que tengo”.
Sin duda hay situaciones en las cuales es imposible hacer algo definitivo, pero siempre hay una alternativa mejor a la de quedarme sumergido en el fango, susceptible de ser manipulado, engañado y explotado por quienes tuvieron la suerte de nacer en cuna dorada o supieron el momento y sujeto precisos para arrodillarse. Mas nada puede cambiar si no se tiene la voluntad de hacerlo.Yo, que formo parte de una buena familia, sé que la droga y analfabetismo son causas y efectos de la pobreza que muchos poderosos prefieren ignorar, pero para alguien que ha nacido en ese entorno es muy difícil ver como tales las falencias que percibo al ser un ente externo.
¿Cómo el pueblo puede percatarse de esa realidad y al menos, intentar cambiarla, si los poderosos la cubren con un velo de futilidad y le dan oportunidades a quienes no se las merecen?

sábado, 7 de julio de 2007

¿La memoria es para olvidar?

Esta mañana soñé que Iván me proponía ir a un mall y acabábamos en un sitio eriazo como las Lomas de Lo Aguirre, en el local de una bruja que en pocas palabras, le ofrecía a mi hermano un amuleto talismánico consagrado a Basth, la diosa gato egipcia, cuyo propósito sin embargo, era borrar la memoria del portador para dejar atrás todo sufrimiento y las culpas, función que en la antigüedad era atribuida a Mnemosin, la diosa griega de la memoria quien dicho sea de paso, tuvo como hijas a las nueve musas con Zeus, según la mitología. El punto es que en mi sueño, raro como yo, sostuve una discusión filosóficamente moralista con dicha hechicera, que a toda costa pretendía finalizar la transacción con Iván. Mientras ella afirmaba que con ese amuleto (una vela marrón o rojiza delgada con una perforación en su centro más grueso, que simbolizaba el útero y al cual denominó como Laberinto de Bastet) mi hermano podría olvidar todo sufrimiento y culpa, yo me oponía argumentando que la memoria es para olvidar.
En un momento, la mujer decrépita vierte talco en su mesón para iniciar el ritual, al tiempo que reafirma su punto diciéndome: “Las culpas no aportan nada bueno al hombre, sólo sufrimiento. Borrando los malos recuerdos de tu hermano, haré que sea feliz”. Sin embargo, soplo el talco y éste se difumina en el aire en tanto argumento que: “Las partículas suspendidas son como los fragmentos de recuerdos en la memoria de Iván, porque su ritual no podrá extirpar todo el sufrimiento y lo dejará sin un pasado coherente”.
La bruja se molesta conmigo y arguye: “Tú deseas el sufrimiento de tu hermano; no dejas que borre sus errores y lo haga feliz”. A esto yo objeto que: “Sin el recuerdo de sus errores pasados, mi hermano se arriesga a cometerlos nuevamente, pues borrará su memoria pero no cambiará su modo de ser. Los errores le permiten aprender al ser humano y sin sus recuerdos, por malos que sean, mi hermano dejará en el olvido todo lo aprendido”. Ante esto, la mujer calla y en ese momento, papá me despertó.
Ignoro los motivos de este sueño, pero es indudable que la gran mayoría de nosotros ha deseado alguna vez olvidar los oscuros episodios de su vida o retroceder en el tiempo, para cambiar los sucesos. Sin embargo, las repercusiones de esto si fuera posible, cambiarían no sólo nuestras vidas, sino toda la humanidad, como el Efecto Mariposa. ¿Cómo podríamos saber entonces, cuando estamos a punto de repetir los errores que quisimos cambiar? ¿Cómo podríamos estar seguros de que dicho cambio no será peor que nuestro error inicial?
Por alguna parte leí que el destino es aquello que se interpone cuando tenemos otros planes. Pero saber cómo opera exactamente el destino es algo imposible para la limitada mente humana. Tal vez mamá tenga razón al decir que todo cuanto nos ocurre es consecuencia de nuestros propios actos, lo que se conoce místicamente como la Ley de Causa y Efecto.
Quizá algunos crean que nuestras vidas no son sino producto del azar y por tanto, una mezcla sinsentido de sucesos que al ser narrados cobran significado. Aquí podría verse si es regular aquello de “Si haces el mal, no obtienes el bien”. Doquiera que vengamos, existen pautas morales universales, como el hecho de que golpear a la propia madre es mal visto en Chile, Japón o Groenlandia.
Bajo ese precepto, no cabe decir que el mal depende de lo creído por cada individuo; el sufrimiento y la culpa no difieren mucho de oriente y occidente. Distinto es que aquí seamos menos rigurosos que en Japón.
El punto es cuán difícil sería saber si en mi sueño la bruja o yo estábamos en lo correcto. Bajo mi lupa, que carga con toda una cosmovisión cultural arrastrada desde hace milenios, el sufrimiento efectivamente le permite al ser humano aprender de sus errores; pero otro individuo procedente de un sistema cultural distinto, podría creer que borrar la memoria de alguien sería bueno para evitar la culpa y entonces, dependería únicamente de su libre albedrío e intuición repetir o no los pasos en un mundo que inevitablemente, te conduce a errar.
Que al borrar la memoria se extirpe el sufrimiento de una persona por sus culpas, depende de evitar que dicho individuo cometa los mismos errores del pasado, lo cual seguramente se lograría al cambiar todo el entorno. Pero aun recordando todo lo vivido, ¿no cometemos a veces los mismos errores? Es lo que técnicamente los psicólogos denominan “patrón de conducta” y vulgarmente se conoce como “tropezar con la misma piedra”. Si lo vemos así, es fácil deducir que a veces sufrimos porque buscamos hacerlo y no por culpa de terceros… Lo malo es, que tendemos a culpar a otros por nuestro sufrimiento y nos cuesta reconocer cuánta responsabilidad tenemos en nuestro propio dolor. Sin embargo, si la vida fuese un autobús, ¿no sería mejor ser el conductor que un simple pasajero? De ello dependería cuánto pudiéramos aprender de nuestros errores.

viernes, 6 de julio de 2007

Carta a Sebastián Piñera

Excelentísimo Sr. Piñera:
Junto con saludarlo, me dirijo a usted con el objeto de plantearle determinada situación, que como chileno debo denunciar. Antes que todo, cabe mencionar que soy técnico en comunicación social con mención en producción de eventos; estudiado en el Centro de Formación Técnica ALPES y titulándome en diciembre de 2005 con calificación 6,7 en mi examen de título y 6,5 en la práctica profesional.
Mientras terminaba mis estudios y motivado únicamente por mi vocación, escribí una novela épica que aún no publico, para la cual estudié paralelamente distintas culturas y mitologías vigentes el año 1795 a. de C., ambientándola en la antigua Babilonia.
Desde mi titulación hasta el pasado viernes 29 de junio del presente año he enviado por correo electrónico o entregado personalmente mi currículum vitae en distintos sitios sin tener respuesta alguna. Obviamente no puedo esperar que las empresas hagan una excepción conmigo, si bien muchos compatriotas, algunos más capacitados que yo, comparten mi situación.
Considerando que estudié comunicación social, he acudido a distintos medios abrigando el sueño de desarrollarme profesionalmente. Entregué currículums en Chilevisión, Canal 13 y Telecanal al tiempo que enviaba por correo electrónico a los mismos canales además de UCVTV, La Red, TVN y Mega, donde incluso me contacté con una ex compañera de carrera que lamentablemente, no pudo o no quiso ayudarme.
Lejos de claudicar, envié el documento a diversas publicaciones tales como Las Últimas Noticias, El Mercurio, La Cuarta, revista Diabetes Hoy_ya que padezco dicha enfermedad hace trece años_, TV Grama, TV y Novelas, Caras, Cosas y Miss 17.
Al no obtener resultados y aún sabiendo que no disfruto de privilegios como ciudadano, seguí enviando mi hoja de vida a Radio Nacional, Tiempo FM, FM Hit, Radio Zero y entregándola personalmente en Radio Carolina FM.
Sin ánimo de aburrirlo con toda mi odisea en busca de una oportunidad laboral, debo obligatoriamente mencionarle cada lugar donde lo he intentado para no ser considerado un oportunista. Tampoco quiero parecer una víctima, pero a estas alturas usted podría estar preguntándose “¿Por qué no lo ha intentado en alguna productora de eventos?”… Pues bien, aquel 29 de junio, además de entregar personalmente mi currículum en Chilevisión, lo envié por correo a un reciente contacto que trabaja en una productora.
Pese a todo, mi situación se complica aún más, ya que soy minusválido y padezco una displejia espástica que en pocas palabras, me tiene atado permanentemente a una silla de ruedas. No cuento esto para inspirar lástima, sino porque mi siguiente paso fue inscribirme en la bolsa laboral del FONADIS e incluso solicitar trabajo tanto en el Teatro Teletón como en el Instituto de Rehabilitación Infantil, donde desgraciadamente la asistente social de turno ni siquiera me recibió el currículum vitae, argumentando que luego del alta médica de sus pacientes, la institución los llama ocasionalmente para aplicar una encuesta orientada a la calidad de vida, pero no dan trabajo porque su propósito es, y cito textualmente: “cortar el cordón umbilical con los niños y que ya no dependan de nosotros”.
Decepcionado por tal negativa, me inscribí en la bolsa laboral de ALPES y envié mi currículum al Teatro Universidad de Chile, donde anteriormente realicé mi práctica profesional. Pasó mucho tiempo en que pese a mi insistencia con todas las empresas ya mencionadas, no obtuve respuesta alguna.
¡Y por Dios! En un intento que podría perfectamente denominarse como desesperado, hice el intento en la cadena Mall Plaza, Saxoline, Extreme, VTR y hasta llenando un formulario de una productora publicitaria por internet, para participar como modelo en un spot; pero al parecer, no soy tan atractivo como creía… Si uno quiere saber cuán guapo es, no debe creerle a la madre, sino solicitar la aprobación o rechazo de especialistas en castings y modelaje.
Con mi autoestima ya casi destruida, pero apelando al último vestigio de fe en la humanidad que tenía para entonces, intenté inscribirme en el comando de su campaña para la presidencia de nuestra República, por internet ya que como comprenderá, en mi situación tampoco es viable gastar dinero en movilización si no tengo algo seguro. Sin embargo, usted perdió las elecciones y recién entonces supe que no tendría oportunidad de trabajar a su lado.
Como si eso fuera poco, además entregué un currículum en la municipalidad de mi comuna, Lo Prado, donde también gestioné la pensión de discapacidad que para ahora, asumo haber perdido porque fui advertido de lo difícil que es conseguirla. Luego, me contacté con alguien que trabaja directamente con Michelle Bachelet, quien me dijo que “La Presidenta no puede emplear a alguien específico, pues entonces debería hacerlo con cada cesante de este país y es por ello que existe FONADIS u otros organismos”.
Ahora escribo un blog para canalizar mi urgente necesidad de comunicar. Gracias a él, un joven cineasta porteño se enteró de mi novela y me ha contactado para que en un futuro, cercano espero, colabore como parte de un equipo en un film que competirá en cierto concurso internacional.
Después de todo este peregrinaje, no puedo evitar preguntarme: ¿La razón de mí prolongada cesantía se debe a una arraigada discriminación contra los minusválidos? ¿Es posible que tan sólo sea producto de la real condición de cesantía en este país, que de algún modo se falsea mediáticamente? ¿O las empresas comunicacionales a las cuales acudí, consideran que ser técnico en comunicación social no es tan prestigioso como ser licenciado en dicha profesión o periodista?
Le escribí el presente mensaje no tan sólo para narrarle gran parte de mi vida durante estos últimos años, sino francamente para pedirle una oportunidad de trabajo en la cual pueda desempeñarme como comunicador y así, hacer posible que pese a mi discapacidad física y no mental, pueda ser solvente e independiente, ayudando incluso a mis padres, de los cuales como comprenderá, a los ya casi veintiséis años no puedo seguir dependiendo completamente.
Espero sinceramente tener alguna respuesta suya y desde luego, agradezco de antemano su anuencia. Sin otro particular, se despide atentamente,
Carlos Flores A.
COMUNICADOR SOCIAL,
PRODUCTOR DE EVENTOS.
Enviado por correo electrónico a los medios de comunicación masiva escritos.

miércoles, 4 de julio de 2007

La mejor virtud gay

Ayer hablé del peor defecto gay y hoy, de la mejor virtud, según mi criterio. Quede claro que algunas virtudes pueden ser consideradas por otros como defectos, pero las he puesto aquí según su contexto.
El síndrome Marta Stewart, que padecen todos aquellos gays con excelente gusto para cocinar, vestir, decorar y elegir pareja. Tienen una brújula cerebral increíblemente bien calibrada para dar con los restaurantes, las discotecas, marcas y tiendas más costosas, sofisticadas, renombradas y frecuentadas por personalidades públicas. Pueden no tener un trozo de pan para echarse a la boca, pero si van a una reunión social, serán la envidia de todos los asistentes. A éste se le confunde muchas veces con el metrosexual y a veces, es excéntrico.
El optimista compulsivo es aquel gay que aun cuando esté pasando por la peor etapa de su vida, tiene la cara llena de risa y con él, nadie se deprime. Son fabulosos en reuniones sociales, el centro de atención en cualquier sitio y sin importar su atractivo físico, es su roce social la cualidad más destacada, que suele complementarse con magnetismo o ternura notables. Tienen excelente sentido del humor, conocimientos de cultura general y pueden convertirse incluso, en carismáticos líderes de opinión.
El Dr. Corazón es sin duda, ese gay a quien invariablemente acuden hombres y mujeres en busca de orientación sentimental o un consejo en casi cualquier área, especialmente si es afectiva. Posee gran empatía con ambos géneros, sabiendo lo que cada miembro de una pareja espera y puede entregar al otro. Es bastante comprensivo y tolerante al momento de escuchar interminables desahogos de sus conocidos… Con frecuencia sus consejos son acertados, pues tiene varios casos similares. Sin embargo, su regla dorada es aconsejar sin manipular el libre albedrío de quien acude a él o en otras palabras “Te digo lo que deberías hacer según mi criterio, pero tú decides al final”.
Si alguno de ustedes tiene un aporte con el cual complementar este artículo, comente en el área de “manifestantes”.

martes, 3 de julio de 2007

El peor defecto gay

Hace más de ocho años mi mejor amiga, Cury, me dijo en una conversación “El peor defecto de los gays es que tienen lo peor de un hombre y lo peor de una mujer”. En aquel entonces, defendí a brazo partido que todos tenemos ciertos derechos humanos inalienables; sin embargo, no entendí su punto de vista quizá por la inmadurez y con el transcurso del tiempo, me di cuenta de que desgraciadamente tenía razón, hasta cierto punto.
Por un lado, hay algunos defectos que se presentan en todos los homosexuales que conozco, variando la intensidad. Pero lo importante es que estas debilidades no se deben a la orientación sexual, sino a la condición humana que sumada a las circunstancias sociales, se acentúan grandemente.
Por ejemplo, aquellos homosexuales a quienes me refiero presentan la envidia cuando están frente a un competidor o competidora socialmente más competente y aceptable, especialmente cuando sus parejas parecen sentirse atraídas. Esta atracción no necesariamente implica aspectos sexuales, pero ésta es la primera ocurrencia en un gay celoso.
Llamo desorientación cardinal cuando a un gay le falla el queereye y se enamora de un heterosexual que jamás le corresponderá, ni siquiera usando magia. Esto es peligrosísimo, pues el enamorado tiende a confundir cualquier gesto de amabilidad con correspondencia y al momento del desengaño, el sufrimiento puede ser enormemente depresivo.
El gay vanidoso es uno de los peores, pues va por la vida creyéndose lo mejor que Dios ha puesto sobre la Tierra y cuando se relaciona con alguien, tiende a comportarse como si estuviese haciéndole un favor. Es guapo, presumido, despectivo, cruel, a veces infiel, cobarde y mentiroso; reúne bastantes defectos de los cuales, algunos no son tan graves por separado. Pobre del alma que se le ocurra elogiar en lo más mínimo a esta subespecie, pues tendrá que soportar permanentemente la indiferencia y humillación a las cuales somete a sus víctimas.
El megalómano presenta bastante de las anteriores características, pues es vanidoso, presumido, cruel, cree que cualquier ser humano que él desee le corresponderá y tiende a equivocarse cuando cataloga la orientación sexual de alguien. Sin embargo, la característica más sobresaliente es que ve gays por doquier según el modo de vestir, caminar, hablar y comportarse de la gente que va por la calle, como si los de su orientación fuesen el poder oculto tras las ramas gobernantes del mundo.
El adorador de Eris, que disemina discordias, intrigas, discusiones, rumores y peleas por donde va. Puede hacerlo como pasatiempo, involuntariamente o cuando tiene herido el orgullo si un amor platónico lo rechaza o si le sale competencia al camino. Ojo, que éste es capaz de hacer cualquier cosa para vengarse.
El último de este breve recuento es la loka ofendida, que podrá verse reflejado en cualquiera o ninguno de los anteriores y se ofenderá terriblemente de que alguien haya osado llamar todas estas cosas a la comunidad gay. Deseará tener la oportunidad de ponerme una bomba, porque al igual que yo hace años, creerá que estoy atacando indistinta y gratuitamente a todos los homosexuales, aunque mi verdadera intención sea advertir sobre los defectos más y menos peligrosos cuando se busca pareja.
Quedaron fuera los ególatras, lujuriosos, superficiales, afeminados, arribistas y derrochadores porque ¿quién de nosotros no lo ha sido alguna vez? Además, son características presentes en los anteriores tipos.

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Yahya. Carlos Flores A.
Escritor chileno.