A estas alturas, definitivamente todo el mundo ha escuchado sobre el romance de Cecilia Bolocco y el empresario italiano Luciano Marocchino, que se hizo público gracias a las comprometedoras fotos tomadas por el paparazzi chileno Ángel Mora en las afueras de la casa que la ex Miss Universo tiene en Miami.
Este caso ha cobrado matices que van desde lo fútil a lo moral, desde lo profano a lo religioso y desde lo proletario a lo legal. De hecho, es interesante hasta cierto punto analizar la importancia que tienen las consecuencias sociales del proceder de una figura pública a quien dicho sea de paso, en ninguna otra parte se le rinde tanta pleitesía como aquí.
Este caso ha cobrado matices que van desde lo fútil a lo moral, desde lo profano a lo religioso y desde lo proletario a lo legal. De hecho, es interesante hasta cierto punto analizar la importancia que tienen las consecuencias sociales del proceder de una figura pública a quien dicho sea de paso, en ninguna otra parte se le rinde tanta pleitesía como aquí.
Partamos de la base que sólo para los chilenos este hecho es escasamente importante porque Cecilia Bolocco lo protagoniza; tanto argentinos como mejicanos lo informan como la infidelidad sufrida por un ex presidente y candidato trasandino. En otras palabras, Bolocco es afuera sólo la ex esposa de un ex presidente, no la gran diva intocable que es aquí.
Con la publicación de nuevas y más comprometedoras imágenes en cierta revista farandulera mejicana, se hace evidente la infidelidad de Bolocco que según Víctor Gutiérrez, ya es repetida. Además, queda en entredicho la consecuencia de Canal 13 como estación católica al tener contratada a esta figura, quien descaradamente ha ido contra los ideales que tal institución afirma defender.
Por una parte, Cecilia dijo sentirse “traicionada”. ¡Por favor! Según afirmó para “S.Q.P.” esta mañana Olga Wornat, autora de la biografía no autorizada de Carlos Menem, este ex presidente es odiado por los argentinos y al haberle puesto los cuernos, Cecilia Bolocco se transformó involuntariamente en la vengadora de aquel pueblo, cuestión confirmada por el periodista trasandino Marcelo Polino para el mismo programa. Sin embargo, a diferencia de la legislación chilena, la argentina considera delito el adulterio, por lo cual esta “señora” podría incluso sufrir represalias legales por parte de quien es ahora su ex marido. Aunque tampoco debe uno pecar de ingenuo al creer que con su tejado de vidrio, Menem se atreverá a tomar tales medidas, pues de hacerlo, le corresponderá rendir cuentas de todas sus posesiones y fortuna ante la justicia.
Como si esto fuera poco, todos los que en su momento defendieron a Bolocco argumentando la violación de su privacidad por parte de Ángel Mora –entre ellos mi madre-, estaban rotundamente equivocados. Esto porque según la legislación de La Florida, está penado atentar contra la moral en espacio público y la terraza en la casa veraniega de Bolocco da a una orilla de playa sin haber ningún bloqueo visual para ocultar lo ocurrido en ese espacio. Ello significa que, del mismo modo como Mora tomó las fotos, pudo haberlo hecho cualquier otra persona que transitara en una lancha mientras la pareja mantenía relaciones sexuales. Más aún, cualquier testigo que pudiera sentirse ofendido, podría querellarse contra Cecilia.
Por otro lado, reitero mi posición sobre el incondicional apoyo que Canal 13 y en consecuencia, la Iglesia Católica como institución, le da a Bolocco. Creo pues, que como organización derivada y representante de ideologías morales que van contra la homosexualidad, el aborto, el adulterio, el exhibicionismo, la drogadicción, las relaciones sexuales extramaritales y otros fenómenos sociales, no deberían encubrir o bajar el perfil tan descaradamente a las actitudes de aquella mujer sólo porque es uno de sus rostros.
Pamela Jiles dijo muy acertadamente que si bien Canal 13 advirtió el despido de Bolocco al salir nuevas fotografías, no lo hará porque es inconveniente deshacerse de una funcionaria a quien le han pagado tanto dinero y que al salir mal parada, podría pasearse por cuanto programa farandulero existe dando su versión de los hechos. Según dice, les conviene más sacarla de pantalla y retenerla por contrato exigiendo su discreción.
Olga Wornat por su parte, dijo algo evidente: Carlos Menem afirma que está separado de Cecilia Bolocco desde hace bastante tiempo, porque no le conviene quedar como un cornudo públicamente, aunque ya lo ha sido reiteradamente...
En cuanto a las declaraciones más absurdas de opinólogos: En primer lugar está Raquel Argandoña, que en el programa “Buenos días a todos” afirmó que Marocchino y Bolocco hacen una bonita pareja. ¡¿Cómo no decir eso, si debió sentirse plenamente identificada al estar con Oscar “Lolo” Peña hace cuatro años?! El punto no es cómo se vea la pareja, sino la falta de Cecilia y cómo critica todo lo grosero, inmoral o fuera de lo común para luego, hacer esto.
Es claro que todos podemos hacer con nuestras vidas y culos lo que mejor nos parezca, pero no podemos predicar con el miembro en la mano, sabiendo que tarde o temprano se nos caerá encima la espada de Damocles y todos aquellos a quienes hayamos criticado, nos regresarán el favor.
En segundo lugar está Eliana de Caso, que en el programa “Juntos en la mañana” de Canal 13 dijo que el material gráfico mostraba puro amor. Eso sólo lo dice alguien muy tonto, ingenuo o que definitivamente vive en otro planeta, donde hasta lo más bizarro es color de rosa.
El tercer lugar lo ocupa René Naranjo, que criticó a “S.Q.P.” por abordar el caso de Cecilia y no la separación de Roberto Dueñas y Marlén Olivari. Cualquiera que haya visto ese programa desde febrero del presente año hasta poco más de tres semanas atrás, sabe que le dieron tan amplia cobertura a cada detalle de lo ocurrido con esa pareja, que cansaron.
En cuarto lugar está la también conductora del matinal de Canal 13, Karla Constant, quien acusó a Ángel Mora y la revista “S.Q.P.” de destruir carreras. ¿Se refería a la carrera de Marocchino como cafiche o a la de Bolocco como conductora, posible Primera “Dama” e intocable diva moralista, ahora desenmascarada?
El quinto lugar lo comparten los panelistas del programa farandulero “Alfombra Roja” de la estación católica, dentro de quienes está Diana Bolocco. Afirman que esto “no es noticia”. Seguramente si la afectada no fuese pariente de la conductora y rostro del canal, sino alguien de menor importancia para ellos, lo comerían vivo.
Y en sexto lugar, pero no menos importante, se encuentra el propio Ángel Mora, una de las tantas putas arrepentidas de este cuento, que luego de mostrar todas las tomas al equipo de la revista “S.Q.P.”, apareció en Canal 13 asegurando que no existía una segunda entrega y pidiendo perdón por todo el daño causado. El equipo de la revista considera una deslealtad que luego de datear al paparazzi sobre el encuentro Marocchino-Bolocco en Miami, contratándolo para conseguir las fotos y haberlas visto, éste se niegue a entregárselas todas, desmienta su existencia y apareciendo ahora en un medio mejicano.
Cuando desenmascaras a alguien teniendo todas las razones, argumentos y evidencias, debes morir al pie del cañón y ser consecuente, no arrepentirte como un cobarde y pedir perdón si no corresponde. Te prestas para que te basureen gratuitamente. Lo digo por experiencia propia, pues me ha tocado desenmascarar a gente y no he ofrecido disculpas, pues me aseguro de tener la razón antes de hablar y cuando lo hice por última vez, fue con pleno conocimiento de causa.
Sólo Dios sabe en qué terminará este escándalo. Lo único seguro es que la familia Bolocco entera seguirá siendo comidilla farandulera por un buen tiempo más, producto del mal proceder de una integrante y además, lo que mal empieza, mal termina.
Con la publicación de nuevas y más comprometedoras imágenes en cierta revista farandulera mejicana, se hace evidente la infidelidad de Bolocco que según Víctor Gutiérrez, ya es repetida. Además, queda en entredicho la consecuencia de Canal 13 como estación católica al tener contratada a esta figura, quien descaradamente ha ido contra los ideales que tal institución afirma defender.
Por una parte, Cecilia dijo sentirse “traicionada”. ¡Por favor! Según afirmó para “S.Q.P.” esta mañana Olga Wornat, autora de la biografía no autorizada de Carlos Menem, este ex presidente es odiado por los argentinos y al haberle puesto los cuernos, Cecilia Bolocco se transformó involuntariamente en la vengadora de aquel pueblo, cuestión confirmada por el periodista trasandino Marcelo Polino para el mismo programa. Sin embargo, a diferencia de la legislación chilena, la argentina considera delito el adulterio, por lo cual esta “señora” podría incluso sufrir represalias legales por parte de quien es ahora su ex marido. Aunque tampoco debe uno pecar de ingenuo al creer que con su tejado de vidrio, Menem se atreverá a tomar tales medidas, pues de hacerlo, le corresponderá rendir cuentas de todas sus posesiones y fortuna ante la justicia.
Como si esto fuera poco, todos los que en su momento defendieron a Bolocco argumentando la violación de su privacidad por parte de Ángel Mora –entre ellos mi madre-, estaban rotundamente equivocados. Esto porque según la legislación de La Florida, está penado atentar contra la moral en espacio público y la terraza en la casa veraniega de Bolocco da a una orilla de playa sin haber ningún bloqueo visual para ocultar lo ocurrido en ese espacio. Ello significa que, del mismo modo como Mora tomó las fotos, pudo haberlo hecho cualquier otra persona que transitara en una lancha mientras la pareja mantenía relaciones sexuales. Más aún, cualquier testigo que pudiera sentirse ofendido, podría querellarse contra Cecilia.
Por otro lado, reitero mi posición sobre el incondicional apoyo que Canal 13 y en consecuencia, la Iglesia Católica como institución, le da a Bolocco. Creo pues, que como organización derivada y representante de ideologías morales que van contra la homosexualidad, el aborto, el adulterio, el exhibicionismo, la drogadicción, las relaciones sexuales extramaritales y otros fenómenos sociales, no deberían encubrir o bajar el perfil tan descaradamente a las actitudes de aquella mujer sólo porque es uno de sus rostros.
Pamela Jiles dijo muy acertadamente que si bien Canal 13 advirtió el despido de Bolocco al salir nuevas fotografías, no lo hará porque es inconveniente deshacerse de una funcionaria a quien le han pagado tanto dinero y que al salir mal parada, podría pasearse por cuanto programa farandulero existe dando su versión de los hechos. Según dice, les conviene más sacarla de pantalla y retenerla por contrato exigiendo su discreción.
Olga Wornat por su parte, dijo algo evidente: Carlos Menem afirma que está separado de Cecilia Bolocco desde hace bastante tiempo, porque no le conviene quedar como un cornudo públicamente, aunque ya lo ha sido reiteradamente...
En cuanto a las declaraciones más absurdas de opinólogos: En primer lugar está Raquel Argandoña, que en el programa “Buenos días a todos” afirmó que Marocchino y Bolocco hacen una bonita pareja. ¡¿Cómo no decir eso, si debió sentirse plenamente identificada al estar con Oscar “Lolo” Peña hace cuatro años?! El punto no es cómo se vea la pareja, sino la falta de Cecilia y cómo critica todo lo grosero, inmoral o fuera de lo común para luego, hacer esto.
Es claro que todos podemos hacer con nuestras vidas y culos lo que mejor nos parezca, pero no podemos predicar con el miembro en la mano, sabiendo que tarde o temprano se nos caerá encima la espada de Damocles y todos aquellos a quienes hayamos criticado, nos regresarán el favor.
En segundo lugar está Eliana de Caso, que en el programa “Juntos en la mañana” de Canal 13 dijo que el material gráfico mostraba puro amor. Eso sólo lo dice alguien muy tonto, ingenuo o que definitivamente vive en otro planeta, donde hasta lo más bizarro es color de rosa.
El tercer lugar lo ocupa René Naranjo, que criticó a “S.Q.P.” por abordar el caso de Cecilia y no la separación de Roberto Dueñas y Marlén Olivari. Cualquiera que haya visto ese programa desde febrero del presente año hasta poco más de tres semanas atrás, sabe que le dieron tan amplia cobertura a cada detalle de lo ocurrido con esa pareja, que cansaron.
En cuarto lugar está la también conductora del matinal de Canal 13, Karla Constant, quien acusó a Ángel Mora y la revista “S.Q.P.” de destruir carreras. ¿Se refería a la carrera de Marocchino como cafiche o a la de Bolocco como conductora, posible Primera “Dama” e intocable diva moralista, ahora desenmascarada?
El quinto lugar lo comparten los panelistas del programa farandulero “Alfombra Roja” de la estación católica, dentro de quienes está Diana Bolocco. Afirman que esto “no es noticia”. Seguramente si la afectada no fuese pariente de la conductora y rostro del canal, sino alguien de menor importancia para ellos, lo comerían vivo.
Y en sexto lugar, pero no menos importante, se encuentra el propio Ángel Mora, una de las tantas putas arrepentidas de este cuento, que luego de mostrar todas las tomas al equipo de la revista “S.Q.P.”, apareció en Canal 13 asegurando que no existía una segunda entrega y pidiendo perdón por todo el daño causado. El equipo de la revista considera una deslealtad que luego de datear al paparazzi sobre el encuentro Marocchino-Bolocco en Miami, contratándolo para conseguir las fotos y haberlas visto, éste se niegue a entregárselas todas, desmienta su existencia y apareciendo ahora en un medio mejicano.
Cuando desenmascaras a alguien teniendo todas las razones, argumentos y evidencias, debes morir al pie del cañón y ser consecuente, no arrepentirte como un cobarde y pedir perdón si no corresponde. Te prestas para que te basureen gratuitamente. Lo digo por experiencia propia, pues me ha tocado desenmascarar a gente y no he ofrecido disculpas, pues me aseguro de tener la razón antes de hablar y cuando lo hice por última vez, fue con pleno conocimiento de causa.
Sólo Dios sabe en qué terminará este escándalo. Lo único seguro es que la familia Bolocco entera seguirá siendo comidilla farandulera por un buen tiempo más, producto del mal proceder de una integrante y además, lo que mal empieza, mal termina.
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