Hoy recibí una tarjeta electrónica felicitándome por mi cumpleaños. En esta época de grandes avances tecnológicos que nos permite pasar por alto las distancias e incluso los idiomas, hacerle llegar tu cariño a alguien importante que no ves frecuentemente, es lo más fácil del mundo.
Lo importante es que dicha tarjeta fue enviada por Nikos, mi amigo griego de My Space con quien mantengo correspondencia electrónica desde hace tiempo. Partimos hablando sobre nuestros gustos en música, cine y televisión, pero ahora sé que tiene una hermana dos años mayor, cuenta con veintiocho primaveras a su haber, es periodista y le gustaría conocer mi país tanto como a mí el suyo.
Definitivamente internet abre un sinfín de posibilidades… Si hace un año alguien me hubiese dicho que tendría un amigo griego, con lo que me agrada aquella cultura, no lo habría creído. Es sorprendente que luego de buscar amistades e incluso trabajo en mi propio país, no encontrara nada aún, sino sólo decepciones, mientras que al otro lado del mundo un hombre griego buscó mi amistad después de leer en mi página que me agrada el pop griego, turco y árabe.
Nikos me parece una joya, la aguja en el pajar, pues siendo tan difícil hacer amistad con alguien que podría vivir en mi ciudad o incluso al otro lado de mi calle, cuando lo intento sólo encuentro a gente farsante el 90% de las ocasiones. No niego que el otro 10% corresponde a gente sincera, afable y honesta cuyos valores morales te permiten estar seguro de no ser burlado.
Sin embargo, cuando te aventuras a hacer amistades por un medio de comunicación que bajo cualquier instancia puede ser frío, no debes olvidar que si bien recibes mensajes de una persona, no estás frente a ella y de ser así, podrías encontrarte con alguien completamente opuesto a tus expectativas; el clásico ejemplo se da con las falsas descripciones físicas, que no son tan riesgosas como un rostro bonito cuya alma es negra.
Por otro lado, buscar amistades no es tan arriesgado como buscar pareja. Usualmente se comete el error de pretender a alguien con maravilloso aspecto físico, grandes potenciales de éxito profesional y cualidades emocionales prodigiosas… Somos poco realistas e irracionales al esperar que internet sea nuestra hada madrina, pues por lo general y con escasas excepciones, quien llena los requisitos emocionales al ser sincero, afable, honesto, fiel, divertido, culto, inteligente, sensible, comprometido, apasionado o algo más, es el menos pensado. Al contrario, quien posee gran belleza física o éxito no necesita meterse a buscar pareja en internet.
Si constantemente pensamos que podríamos encontrarnos con un malvado y siniestro personaje, aunque tengamos intención y razón de ser precavidos, también somos paranoicos. Como bien dicen los ancianos, quien no arriesga no gana y por mi parte, agradezco al Cielo haber admitido a Nikos entre mis amistades porque hasta el momento, me ha dado bastantes alegrías, sin olvidar su calidad como ser humano. Al fin y al cabo, es lo que importa al establecer relaciones afectivas y no la belleza física, éxito profesional, poder económico, ideología política o religiosa, país de origen u orientación sexual.
Es irónico que teniendo tantos medios de interacción humana, seamos tan fríos y regularmente no sintamos remordimiento cuando lastimamos los sentimientos de alguien, porque nos concentramos en nuestras vidas y la concreción de metas que siendo válidas, nos hace ser egoístas. Por ello es tan agradable hallar a una persona a quien le agradas desinteresadamente y no es prejuicioso, pues le interesas humanamente.
Lo importante es que dicha tarjeta fue enviada por Nikos, mi amigo griego de My Space con quien mantengo correspondencia electrónica desde hace tiempo. Partimos hablando sobre nuestros gustos en música, cine y televisión, pero ahora sé que tiene una hermana dos años mayor, cuenta con veintiocho primaveras a su haber, es periodista y le gustaría conocer mi país tanto como a mí el suyo.
Definitivamente internet abre un sinfín de posibilidades… Si hace un año alguien me hubiese dicho que tendría un amigo griego, con lo que me agrada aquella cultura, no lo habría creído. Es sorprendente que luego de buscar amistades e incluso trabajo en mi propio país, no encontrara nada aún, sino sólo decepciones, mientras que al otro lado del mundo un hombre griego buscó mi amistad después de leer en mi página que me agrada el pop griego, turco y árabe.
Nikos me parece una joya, la aguja en el pajar, pues siendo tan difícil hacer amistad con alguien que podría vivir en mi ciudad o incluso al otro lado de mi calle, cuando lo intento sólo encuentro a gente farsante el 90% de las ocasiones. No niego que el otro 10% corresponde a gente sincera, afable y honesta cuyos valores morales te permiten estar seguro de no ser burlado.
Sin embargo, cuando te aventuras a hacer amistades por un medio de comunicación que bajo cualquier instancia puede ser frío, no debes olvidar que si bien recibes mensajes de una persona, no estás frente a ella y de ser así, podrías encontrarte con alguien completamente opuesto a tus expectativas; el clásico ejemplo se da con las falsas descripciones físicas, que no son tan riesgosas como un rostro bonito cuya alma es negra.
Por otro lado, buscar amistades no es tan arriesgado como buscar pareja. Usualmente se comete el error de pretender a alguien con maravilloso aspecto físico, grandes potenciales de éxito profesional y cualidades emocionales prodigiosas… Somos poco realistas e irracionales al esperar que internet sea nuestra hada madrina, pues por lo general y con escasas excepciones, quien llena los requisitos emocionales al ser sincero, afable, honesto, fiel, divertido, culto, inteligente, sensible, comprometido, apasionado o algo más, es el menos pensado. Al contrario, quien posee gran belleza física o éxito no necesita meterse a buscar pareja en internet.
Si constantemente pensamos que podríamos encontrarnos con un malvado y siniestro personaje, aunque tengamos intención y razón de ser precavidos, también somos paranoicos. Como bien dicen los ancianos, quien no arriesga no gana y por mi parte, agradezco al Cielo haber admitido a Nikos entre mis amistades porque hasta el momento, me ha dado bastantes alegrías, sin olvidar su calidad como ser humano. Al fin y al cabo, es lo que importa al establecer relaciones afectivas y no la belleza física, éxito profesional, poder económico, ideología política o religiosa, país de origen u orientación sexual.
Es irónico que teniendo tantos medios de interacción humana, seamos tan fríos y regularmente no sintamos remordimiento cuando lastimamos los sentimientos de alguien, porque nos concentramos en nuestras vidas y la concreción de metas que siendo válidas, nos hace ser egoístas. Por ello es tan agradable hallar a una persona a quien le agradas desinteresadamente y no es prejuicioso, pues le interesas humanamente.
3 comentarios:
Me alegra mucho encontrar tu blog precisamente el día de tu cumpleaños, ¡Felicidades! y enhorabuena por tu Pluma Dorada.
Un abrazo desde España.
Me alegra mucho encontrar tu blog precisamente el día de tu cumpleaños, ¡Felicidades! y enhorabuena por tu Pluma Dorada.
Un abrazo desde España.
No sabes como me alegra encontrarte precisamente el día de tu Cumpleaños. ¡Felicidades! y enhorabuena por tu Plumas Dorada.
Desde España un abrazo.
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